
Recortes a Medicaid y cambios que impactarán a millones en EE. UU, principalmente inmigrantes y personas que reciben ayudas sociales
La recién aprobada ley conocida como “Big Beautiful Bill”, o «Grande y Hermosa Ley» promovida por el presidente Donald Trump, provocará transformaciones profundas en el sistema de salud de Estados Unidos, con efectos que podrían dejar sin cobertura médica a millones de personas y aumentar los costos de atención,, según múltiples análisis especializados.
Entre los principales cambios se encuentran recortes de casi un billón de dólares a Medicaid durante la próxima década, lo que podría dejar entre 12 y 17 millones de personas sin seguro médico para 2034,
Esto incluye a beneficiarios de Medicaid, y de los programas sociales ACA y CHIP.
La ley impone nuevos requisitos laborales, exigiendo que adultos entre 19 y 64 años demuestren al menos 80 horas mensuales de trabajo o formación para conservar su cobertura médica.
Además, se establecen controles de elegibilidad cada seis meses, lo que podría incrementar la burocracia y derivar en más personas perdiendo su seguro.
Otro de los puntos más polémicos es la introducción de copagos obligatorios de hasta 35 dólares por servicio médico para quienes tengan ingresos superiores al 100 % del nivel federal de pobreza.
La normativa también excluye a ciertos grupos de inmigrantes legalmente presentes, como refugiados, asilados y cónyuges víctimas de abuso, de la elegibilidad para Medicaid. Asimismo, elimina el financiamiento a Planned Parenthood dentro de este programa, lo que afectará la disponibilidad de servicios de prevención y salud reproductiva.
Organizaciones del sector salud han alertado que los recortes podrían generar una fuerte presión financiera sobre hospitales, especialmente en zonas rurales, donde muchos podrían verse obligados a cerrar o a limitar servicios.
Aunque la ley contempla la creación de un fondo de 50 mil millones de dólares para apoyar a estos centros de salud, expertos advierten que será insuficiente para compensar los recortes.
La pérdida de cobertura médica y de servicios preventivos podría derivar en un aumento de enfermedades graves, muertes evitables y un incremento en la atención médica de emergencia, elevando además los costos para quienes mantienen seguros privados.
De acuerdo a diversos analistas, «el gobierno impulsa esta reforma como parte de su agenda para financiar recortes fiscales, aumentar el gasto en defensa y reforzar políticas migratorias, incluso a costa de reducir programas sociales.
La “Big Beautiful Bill” supone un giro significativo en la política sanitaria de Estados Unidos, con efectos que podrían dejar a millones sin protección médica y deteriorar los indicadores de salud pública en los próximos años, así como la disminución de los progrmas sobre medio ambiente y cambio climático.
Su aprobación se logró en el Congreso de Estados Unidos, tras intensas negociaciones. La ley avanzó gracias a la mayoría republicana en la Cámara de Representantes y en el Senado, aunque enfrentó fuerte oposición de demócratas y organizaciones de salud,